Responsabilidad

Responsabilidad

El 7 de junio de 1968, el guardia civil José Antonio Pardines, estaba prestando servicio de tráfico en una carretera del País Vasco cuando detuvo un coche en el cual se encontraban dos miembros de ETA. ETA no había matado hasta ese día y empezaría justo en ese momento. Los dos miembros de la organización terrorista ETA, eran Iñaki Sarasketa y Txabi Etxebarrieta, los cuales cuando el guardia civil se agachó para comprobar el número de bastidor del coche, bajaron del vehículo y le mataron disparándole. Los militantes de ETA en ese día tenían varias opciones: podían haber huido, podían haberse encarado al guardia civil, podían haberse entregado, sin embargo, decidieron matar. Por lo tanto, podemos decir que la responsabilidad última de matar reside en el libre albedrío de los terroristas que descartan otro tipo de opción porque consideran que aquellas opciones son menos eficaces y menos inmediatas. La politóloga y experta en temas vinculados con la violencia política, Martha Crenshaw, dice y leo que solo pocas personas que han experimentado la misma situación deciden practicar el terrorismo. Pero es que además Martha Crenshaw añade algo muy interesante y muy importante, dice que el terrorista no parece ser el resultado de patologías mentales. En definitiva, la responsabilidad individual es clave para entender los procesos de radicalización. Quien decide coger un arma, disparar y matar, lo hace secundando su libre albedrío.