Terrorismo nacionalista radical

Gaizka Fernández Soldevilla

Responsable del área Archivo, Investigación y Documentación de la Fundación Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo

Terrorismo nacionalista radical

En España han actuado varias bandas terroristas de corte nacionalista radical, es decir, que exigían la secesión de un territorio para formar un nuevo estado-nación, homogéneo y monolingüe que normalmente exigía también la anexión de territorios limítrofes.
La banda más importante de estas ha sido ETA (Euskadi Ta Askatasuna), fundada entre 1958 y 1959, que empezó a matar 1968. Su objetivo era la consecución de una gran Euskal Herria independiente que se anexionase el País Vasco, el País Vasco francés y Navarra. Como hemos dicho, en 1968 tuvo la primera víctima mortal, Jose Antonio Pardines. Desde entonces siguió matando. Aunque se pensó en ese momento que era una organización antifranquista, después de la muerte de Franco siguió asesinando. Es más, en 1977 cuando se aprobó en Las Cortes la Ley de Amnistía y todos los presos de la banda dejaron las cárceles, ETA mató aún más. Su objetivo era, mediante la violencia, chantajear al Gobierno para que este cediera a sus pretensiones. Finalmente, no lo logró y prevaleció el Estado de derecho, pero a un alto precio. Si hacemos un balance de la historia de ETA, lo que consiguió fue matar a más de 850 personas, secuestrar a 86, herir a casi 2.600 y causar un enorme dolor y unos enormes desperfectos públicos.
No solo ETA ha funcionado en España. Ha habido otras bandas terroristas de corte nacionalista radical; el MPAIAC en Canarias, con una víctima mortal; el Exército Guerrilleiro do Poblo Galego – Ceibe en Galicia, con dos víctimas mortales; EPOCA en Cataluña, con tres víctimas mortales y Terra Lliure, también en Cataluña, con otra víctima mortal.

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